Julio de 1983, vacaciones en Villajoyosa. En esa fecha me enganché irremediablemente a la música de Luis Eduardo Aute (y a la de Silvio Rodríguez). Fueron unas vacaciones especiales, de hecho, celebré mi dieciséis cumpleaños allí, y las compartí con un grupo fantástico de personas de todas las partes de España. Y fue con ese … Sigue leyendo QUEDA LA MÚSICA